NOS REENCONTRAMOS CON LA VICTORIA
Zornotza ST-77; Enerdrink UDEA Algeciras-69 Parciales: 14-12, 18-19 (32-31); 20-19 (52-50), 25-16 (77-69) Este sábado conseguíamos cortar la racha de tres derrotas consecutivas al reencontrarnos con la victoria en un encuentro igualadísimo que resolveríamos en el último cuarto. Así tomamos aire, recuperamos el balance positivo (4 victorias, 3 derrotas) y nos mantenemos en la mitad […]
Zornotza ST-77; Enerdrink UDEA Algeciras-69
Parciales: 14-12, 18-19 (32-31); 20-19 (52-50), 25-16 (77-69)
Este sábado conseguíamos cortar la racha de tres derrotas consecutivas al reencontrarnos con la victoria en un encuentro igualadísimo que resolveríamos en el último cuarto. Así tomamos aire, recuperamos el balance positivo (4 victorias, 3 derrotas) y nos mantenemos en la mitad alta de la tabla de una Conferencia Oeste tremendamente nivelada y competida. Un triunfo que es un paso más para no andar rondando por el abismo de la terrorífica A-2.
El partido ha sido un perfecto ejemplo de lo que es el grupo del “Salvaje Oeste”, donde una fina línea separa el éxito del fracaso, donde cualquier equipo puede ganar a cualquier otro. O perder. Así hemos asistido a un choque quizá carente de vistosidad pero cargado de emoción. Los algecireños llegaban en mejor momento que nosotros, pese a estar detrás en la clasificación; durante nuestras tres derrotas ellos sumaban sus primeras dos victorias. Y bien que nos ha costado que no sumaran la tercera.
Los tres primeros cuartos no resolverían nada. Ni uno ni otro podían despegarse en el marcador. Las mayores rentas no pasarían nunca de los cuatro puntos, y cada vez que uno de los contendientes la alcanzaba, el otro replicaba con contundencia para seguir caminando codo con codo por el transcurso del partido. Todo ello sin mucho margen para el espectáculo, con las defensas poniendo grilletes a los atacantes. Escasos contraataques, escasos triples (uno solo -Raúl Frías- en el primer cuarto) y escasos puntos. El marcador, que avanza a un ritmo que no llega ni al trote cochinero, se queda en 14-12 en el primer cuarto.
El único giro de guion que se da en el segundo acto es que hay mayor actividad más allá del 6’75. Por parte del UDEA empieza su recital triplista el lituano Erikas ‘The Hunter’ Kalinicenko. Raúl y Yevgen Sakhniuk son nuestros mejores anotadores (el ucraniano además coleccionando rebotes), pero en general es la labor colectiva la que prima, sobre todo en generosos esfuerzos defensivos. Hay que apuntar que asistimos a grandes defensas de ambos conjuntos a los hombres que suben el balón, dificultando mucho incluso cruzar el mediocampo, por ahí veríamos a lo largo del partido varias recuperaciones/pérdidas. En las alternativas que se van dando en la ventaja en el marcador (11 al descanso) nos toca a nosotros quedar por delante, 32-31, camino de los vestuarios.
En el tercer cuarto, más de lo mismo. Las defensas siguen en la buena línea general, ya sean individuales o zonales, pero la buena noticia para nosotros es que cada vez más jugadores verdes adquieren protagonismo ofensivo. Eso sí, antes nos dan un susto los andaluces, que también activan elementos en ataque, y de un 35-31 pasamos a un 35-39 luego de un 0-8 que nos recuerda a otros funestos parciales que hemos padecido en las últimas tres jornadas. Queda en susto porque nuestros chicos reaccionan y volvemos al intercambio de golpes y alternancia en el marcador. Sin embargo, los algecireños recobran los cuatro de ventaja (46-50) a pocos segundos de finalizar el cuarto y es en ese momento en el que el partido entra en un punto de inflexión a nuestro favor. Corey Johnson clava un triple, recuperamos el balón y Mikel Sainz de la Maza clava otro, este sobre la bocina, para devolvernos la ventaja, 52-50. Ese 6-0 en un visto y no visto levanta nuestra moral y Larrea ya se deja notar con su aliento.
Y en el último asalto rompemos el partido, por fin. Pol Olivier será un jugador clave mostrando una amplia gama de formas de penetrar a canasta. Claro que enfrente está Kalinicenko sumando de tres en tres. Por eso mediado este periodo seguimos muy igualados, 65-63. Así que hay que frenar al lituano. Joseba Estalayo se convierte en su sombra y logrará evitar que el ‘cazador’ continúe haciéndonos más daño. Ahí la película ya cambia. A partir de ese momento controlamos la situación y pizquita a pizquita adquirimos una renta de cinco puntos. Entonces, a un minuto y veinte segundos del final, Corey anota otro triple y el 73-65 deja ya sellada la victoria. Todavía queda tiempo, pero los verdes saben gestionar perfectamente la ventaja y la victoria se queda en casa, 77-69.
He aquí unos fríos números para que apreciéis la igualdad que se ha vivido en Larrea: durante el partido ha habido 12 empates y ¡27 cambios de ventaja! Ahí queda eso.
El MVP ha sido Yevgen Sakhniuk con 19 créditos de valoración gracias a su doble doble (13 puntos y 11 rebotes), aunque nuestro máximo anotador ha sido Raúl Frías (18 puntos, 4/8 en triples), que ha empatado en valoración a 18 con Pol Olivier (15 puntos, 5 asistencias). Pero no podemos dejar de mencionar a uno de nuestros rivales, Erikas Kalinicenko, que ha sumado 28 puntos, con 7/14 en triples, ha capturado 7 rebotes y su valoración ha sido de 29 créditos.
Necesitábamos esta victoria y la hemos obtenido. Ahora llegan dos salidas consecutivas, la primera el próximo viernes 1 de noviembre a las 21 horas en El Plantío burgalés frente al UBU Tizona y la siguiente el domingo 10 en Logroño ante el Clavijo. Serán dos retos muy duros en canchas muy complicadas. Pero bueno, vamos paso a paso, primero centrémonos en el partido de Burgos al que esperemos llegar con la moral alta tras la bocanada de oxígeno que hemos cogido este sábado. Cuánta falta nos hacía. Con la sonrisa recuperada todo será diferente. Esperemos.
1, 2, 3,…ZOR-NO-TZA!!!